Por Eurohoops team/ info@eurohoops.net
El increíble Llull otra vez decidió un partido crucial, en el que el Real Madrid se impuso al Laboral Kutxa por 86 – 80, abriéndole el paso a su equipo hacia la final de la Copa del Rey.
Con menos de 2 minutos para el final y el marcador a 78 – 78, el aeroplano de Mahón anotó los últimos 8 puntos de su equipo, más de la mitad que había anotado antes de aquel momento, ya que terminó el partido con 15. Aun así, volvió a ser el primer anotador de su equipo y el MVP indiscutible del partido.
El Baskonia no encontró un antídoto para el “virus Llull” que acabó con sus esperanzas de llegar a la final. En vez de eso, intentaron algunos lanzamientos de largo alcance que no tenían acierto. No la mejor opción posible, de verdad. Ioannis Bourousis fue una vez más el máximo anotador (16) y rebotes (13) del Laboral Kutxa, pero al final no tenía ayuda por parte de sus compañeros de equipo.
El Real Madrid entró en el partido llevando a cabo sus esquemas ofensivos de una manera tan ejemplar que hizo parecer que la defensa del Baskonia simplemente no existía. Los vascos reaparecieron en el segundo cuarto. Lanzando unos cohetes por detrás del arco, endosaron un rápido parcial de 14 -0 al final de la primera mitad. Los dos equipos llegaron al descanso con 44-40 en el marcador.
Ambos contendientes estaban cerca durante la mayor parte del tercer período hasta que se reactivó Sergio Rodríguez. Sus 7 puntos seguidos a siete minutos del final del último cuarto le dieron de nuevo una pequeña ventaja al Real Madrid. Tomando el asunto con sus propias manos, Bourousis metió dos grandes tiros consecutivos para empatar el partido, dándole aire a su equipo, pero no recuperando por completo su aliento, ya que a la hora de las brujas los hechizos de Llull no pudieron ser contrarrestados.