Por Alex Molina/ info@eurohoops.net
Nada mejor para preparar una de las semanas más importantes de la temporada que un gran triunfo en tu casa. El Barça ha aprovechado que estamos en épocas muy dadas a los milagros para resucitar en su partido dominical. El 104-90 ante el Dreamland Gran Canaria ha llegado después de que los azulgranas se hayan sobrepuesto a un pésimo inicio de partido, cerrando incluso el cómodo triunfo sin forzar la maquinaria, gustándose y sonriendo antes de los primeros duelos ante el Mónaco.
El 2-20 con el que los amarillos han iniciado el partido, con Shurna (23 puntos)de protagonista principal, ha metido el miedo en el cuerpo a los aficionados culés, que han visto como hoy parecía que tocaba la versión mala del equipo. Pero las rotaciones han cambiado la dinámica del partido, dándole el control al Barça… que no lo ha soltado jamás.
Ya en el segundo cuarto, se ha pasado en un visto y no visto del 26-37 al 52-46, permitiendo a los de Peñarroya, que hoy cumple años, cerrar la primera mitad por delante en el marcador. Las alegrías para los azulgranas no han terminado con el paso por vestuarios, ya que ha sido en la segunda mitad que han llegado las primeras grandes ventajas. A pesar de los intentos de Tobey (16 puntos y 5 rebotes) y Conditt (10 puntos), el amplio arsenal del Barça comenzó a carburar del todo y el partido llegó a su fin. Punter (17 puntos y 5 asistencias), Brizuela (18 puntos y 5 asistencias), Willy Hernangómez (13 puntos y 6 rebotes), Parra… Los protagonistas en el Barça iban cambiando con la sensación de que el nuevo lo hacía mejor que el anterior, por lo que las ventajas de dos dígitos no tardaron en llegar.
Con el partido ya controlado por el bando local, el último cuarto fue un entretenido intercambio de golpes entre ambos equipos, con espacio para el showtime (ese alley-oop a tablero entre Parker y Brizuela ha sido la guinda) y también para el debut de Grujicic.