Por Alex Molina / amolina@eurohoops.net
Tras dos partidos muy lejos de su mejor versión, el Unicaja de Málaga ha visto como la vuelta a casa se traducía en una clara mejoría… y en victoria, que era lo más importante. Victoria de los malagueños ante el Real Madrid por 86-84 en un partido muy caliente, con la sangre como protagonista y que ha tenido de todo.
Uno de los factores principales del gran papel de los de Ibon Navarro ha sido la vuelta de Osetkowski. El rubio favorito de la Costa del Sol ha terminado con 21 puntos y 6 rebotes para ser uno de los culpables del gran arranque local, que aún en la primera mitad, ha logrado de ventajas muy considerables (48-29).
Reacción blanca
Pero era imposible que el Real Madrid no disputara el encuentro. Tras una primera mitad muy floja, los de Chus Mateo se han activado tras el paso por vestuarios y han comenzado la operación remontada. Del 53-38 se ha pasado en un visto y no visto al 53-51, un parcial de 0-13 en el que Hezonja (18 puntos y 6 rebotes), Tavares (11 puntos y 7 rebotes), Musa (15 puntos) y Campazzo (11 puntos) han brillado con luz propia. Verse a tan solo dos puntos de diferencia activó las alarmas en el conjunto local, que logró cerrar el tercer cuarto con un 70-60 a su favor, pero conocedores de que aún había mucho partido por jugarse a pesar de la gran aportación de Carter (15 puntos).
Sangre sudor y lágrimas
Hasta en dos ocasiones tuvo el Real Madrid la oportunidad de empatar el encuentro y meter muchísimo miedo en el cuerpo de los locales, pero ni el triple de Abalde (82-79) ni la de dos de Campazzo (84-82) entraron, por lo que la remontada se quedó en intento… aunque hubo tiempo para una última polémica. Pocos segundos de que Tavares le abriera la ceja a Sima, una acción que los árbitros no pudo ser castigada por la tontería de solamente poder castigar el contacto codo-cara, Musa hizo lo mismo con Perry. El bosnio logró anotar pero lo hizo ganando espacio con el codo e impactando con la cara del de Unicaja. Alberto Díaz (16 de valoración), ya que el 55 local no podía tirar, fue el encargado de darle la victoria a los suyos, ya que se trató de una antideportiva y ahí terminó el encuentro.