Por Javier Molero/ jmolero@eurohoops.net
El Real Madrid se complica las cosas en Euroliga. Los de Chus Mateo pierden en casa ante Paris Basketball (73-82) y se la jugarán al todo o nada ante el Bayern. Los blancos fueron incapaces de igualar el talento y ritmo anotador de los de Splitter, que esutvieron más que cómodos.
Los 23 puntos de Shorts, secundado con Hifi (15) fueron más que suficiente para dar la machada y clasificarse al Playoff en su primera temporada en la máxima competición europea. El Madrid pierde la red que tenía, y con un Palacio entregado a más no poder, no ha sabido aprovechar una oportunidad de la que se puede arrepentir.
Paris repetía la idea de hace unas semanas. Salía con las ideas claras, fundamentado en un TJ Shorts que aprovechaba las ayudas que generaba para encontrar con facilidad a un Hayes que se hinchaba desde línea de fondo. El Madrid insistía con Tavares, pero fue de más a menos. El ritmo endiablado de los franceses se hacía notar (13-13).
Los de Chus Mateo cerraban el aro, pero el daño venía de fuera. Los parisinos priorizaban el triple (como han hecho toda la temporada). Shorts fue cogiendo ritmo, lo que era sinónimo de peligro (18-23). El duelo se fue al plano físico, y los de Splitter estaban muy cómodos en la capital (22-27).
Shorts y Hifi, estelares
La sangría sin balón continuaba en los blancos (26-33), centrados en la figura de Shorts. Era Campazzo el que lideraba la remontada, con Garuba secundando buenos minutos, y desataba el delirio en el público, leyendo lo que pedía el partido.
Hifi, el Rising Star de la Euroliga, entró en escena. Tirando de un talento individual difícilmente iguálale, salvó la papeleta en los momentos difíciles de los franceses (33-41), con ocho puntos consecutivos que llevaban su nombre. En el intercambio de triples no sacaban petróleo los blancos, y el duelo se fue con un preocupante 36-46 al descanso.
El festival de Shorts continuaba, y cada posesión era un mero trámite para Paris. El partido volvía al barro, y las penetraciones eran la única solución para los blancos. El público estaba entregado, y el choque parecía otro (49-55). Los jugadores iban en volandas, pero nunca encontraban un parcial que llevase a creer.
El público hizo creer
TJ Shorts apareció cuando más quemaba el balón (49-61), pero Feliz y Deck volvían a abrir las puertas del manicomio en el enésimo intento de volver a meterse (58-62). El espectáculo estaba servido para un último cuarto que prometía ser la guerra.
La intensidad defensiva se multiplicó en los blancos, pero Paris sacaba fuerza de flaqueza para no decaer (65-66). Ibaka luchó por los segundos esfuerzos y los de Chus Mateo se crecían en los minutos finales. Pero la remontada tardaba en culminarse en los subcampeones de la Euroliga (67-71).
Empezaba el caos con el ansia de los blancos de sacarlo adelante. Hifi silenció el Movistar Arena con un triple propio de las estrellas (68-74) a falta de poco más de dos minutos. Hezonja quería ganarlo (71-76), pero era un imposible París controló a la perfección los instantes finales y se llevó un triunfo de oro (73-81) que les hace ser 7º y aprovechar la primera bala del Play-In.
Ejercicio de madurez superlativo de los franceses, que perdieron en el Movistar Arena hace un par de semanas, y supieron buscar la cosquillas de los blancos, incapaces de contener a las estrellas. El Real Madrid se la jugará ante el Bayern el viernes 18 para tratar de ser octavos y enfrentarse a Olympiacos en Playoff.