Por Alex Madrid / info@eurohoops.net
El Real Madrid, que aspiraba a tener el factor cancha en playoffs antes del inicio de la última jornada, tendrá que viajar primero a Atenas para enfrentarse al Panathinaikos. La victoria sobre el Brose Bamberg 106 – 86 sólo sirvió para dilucidar su rival.
Anthony Randolph hizo su mejor partido en lo que va de temporada y lideró el triunfo con 23 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias y 5 robos para 38 de valoración. Jaycee Carroll, con 19 puntos, y Gustavo Ayón, con 14 y 8 rebotes, brillaron en el Madrid. Daniel Hackett lideró a los alemanes con 17 puntos.
“Sudando la tristeza”, que diría Leiva, ese artista que tanto gusta a Sergio Llull. Con el factor cancha ya perdido y, con la sensación de que daba igual el rival griego al que se enfrentara, el Real Madrid salió a la pista con la intención de hacer un buen encuentro, con un Anthony Randolph que anotó 14 puntos sin fallo en la primera parte. El partido se jugaba a muchas posesiones y, a ritmo de tres, el Madrid se fue por delante en el marcador al descanso (53 – 50).
Con el acierto siendo predominante, parecía cuestión de tiempo que los madridistas se fueran en el marcador. Los de Pablo Laso engrasaron la maquinaria, pisaron el acelerador y sentenciaron el partido en el tercer periodo. El Real Madrid no se planteó el famoso “biscotto”.
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