Por Javier Molero/ jmolero@eurohoops.net
El Real Madrid cierra la pretemporada con victoria ante Baskonia (87-80). Tras un primer cuarto caótico, donde los de Scariolo se vieron superados por un conjunto vitoriano que apretaba los dientes, poco a poco fluyeron, sobre todo a partir del tercero, para encontrar su mejor versión y dar alas a los nuevos fichajes.
Procida, Lyles, Feliz, Tavares… varios héroes en la parte blanca para contrarrestar un más que notable encuentro de los de Galbiati. Luwawu-Cabarrot y Diallo dejaron una gran imagen. Sobre todo el último fichaje, el ex de Oklahoma, que físicamente es un portento. El Madrid tendrá la Supercopa como próxima cita en el horizonte, donde ya no pueden tener errores.
Caótica primera mitad
Baskonia empezó muy activo en línea de pase, con las ideas claras. Buscando correr y yendo directos hacia el aro con Forrest y Diallo como protagonistas, tuvieron un punto más de intensidad al inicio. Fallones los de Scariolo, sin encontrar buenos tiros y con Feliz llevando el mando (7-7).
Erráticos los dos equipos, como es normal en pretemporada. El Madrid sin encontrar a sus interiores sufría, y los de Galbiati sacaron tiros libres con facilidad. Ni Lyles, ni Procida ni un Facu que lo intentaba continuamente sacaban rédito de los estáticos. Completaron un sprint final más que decente para igualar el marcador al final del primer cuarto (16-19).
Hurgó en la herida Baskonia aprovechando un caos constante en la ofensiva blanca. Sergio Llull fue expulsado al inicio del segundo por antideportiva y técnica. Fue Facu el que agitó el avispero y levantó el ánimo de los suyos, que parecían muy perdidos en cada posesión (28-31).
Este chute de motivación tuvo efecto, y con un Tavares que fue creciendo bajo el aro, el Madrid empezaba a coger ritmo. La igualdad seguía, con los de Galbiati castigando la pintura cuando podían, y ninguno terminaba de dominar en el camino a vestuarios (40-38).
El Madrid despertó a tiempo
Subió el ritmo en Pontevedra… pero no el acierto. Feliz volvía a comandar, con un Kramer que, sin estar iluminado desde fuera, hacía buenas tareas sin balón. Lyles, el nuevo refuerzo, soltaba poco a poco la mano para que el Madrid, posesión a posesión, sacase una ventaja cómoda (52-41).
Luwawu-Cabarrot se echó a los suyos a la espalda para tratar de acercarse en el marcador. Ni Spagnolo ni Forrest entraban en contacto, y los de Scariolo castigaban en transiciones. El equipo vasco se topó con un buen Procida, que fue de menos a más, y el Madrid tenía una distancia agradable para el último período (68-59).
Victoria cómoda de los de Scariolo (87-80), que despertaron al inicio del tercer cuarto. Minutos para coger ritmo de cara a una Supercopa Endesa (27 y 28 de septiembre) que promete estar igualada. Se acabaron las pruebas, y La Laguna Tenerife les espera en Málaga en las semifinales de la competición. Por su parte, Baskonia da una mejor cara que el encuentro ante Valencia, con buena actuación de Luwawu-Cabarrot, Diallo y en líneas generales de todo el equipo de Galbiati buscando el aro.