Por Javier Molero/ jmolero@eurohoops.net
Alemania vuelve a una final del Eurobasket. Los campeones del mundo acaban con el sueño finlandés (98-86) y se meten en la pelea por el oro continental por primera vez desde 2005. Previamente, en 1993, consiguieron el primer y único título europeo ante Rusia. Dennis Schröder (26, 12 asistencias) y Franz Wagner (22), superlativos cuando el partido lo necesitaba.
Gracias a un segundo cuarto sensacional (31-21) y la facilidad de controlar todo lo que ocurre cuando están arriba en el marcador, los de Mumbrú no tuvieron apenas sustos de la manada de lobos. Con Nkamhoua (21) y Markkanen (16) como referentes, Finlandia peleará por el bronce en un torneo que ya queda para la historia. Quién sabe si pueden rematarlo con una medalla.
Alemania no tardó en ser un rodillo
Finlandia se plantó en las semifinales con personalidad. Como siempre han hecho. “Da igual el rival que tengamos delante”, decía Salin tras vencer a Georgia en cuartos. Y es así. La manada de lobos buscó tiros liberados, con un muy activo Miro Little con ganas de correr. Wagner estaba fallón en sus primeros intentos (9-16), pero eso iba a cambiar rápido.
😤 Franz Wagner sin contemplaciones hacia el aropic.twitter.com/rHYoClEWRH
— Eurohoops España (@EurohoopsES) September 12, 2025
Schröder tomó el timón, y los campeones del mundo demostraron que también pueden jugar en ritmo alto. Bonga, Franz.. todos le siguieron para que la ventaja no fuera mayor. Un parcial de 13-2 cambiaba los ánimos germanos, impulsados por un trabajador Tristan da Silva y los puntos en la pintura (16 de los primeros 30) para ir arriba al final del primer cuarto (30-26). Y Schröder ya con 7 asistencias en su casillero.
El segundo empezó con desacierto y malos ataques. Sin encontrarse ninguno de los dos en el triple y con una necesidad incomprensible por anotar en pocos segundos, Alemania tenía controlado el partido en que no pasase nada. Cargaron con fuerza Mumbrú los del aro, y ahí son los mejores en todo el torneo para que la distancia, gota a gota, siguiera aumentando (43-28) hasta cifras preocupantes.
Con un Wagner iluminado, hacían lo que querían moviendo el balón. Un torbellino del quizá gran favorito a ganar el torneo y aunque Finlandia viene de hacer alguna que otra épica, esta parecía que se les quedaba grande. Tranquilos y con paso firme hacia la final, los alemanes no se asustaban de cualquier mini-parcial que endosaba Finlandia. Muy cómodos, se marchaban 61-47 a vestuarios y con Franz en 20 puntos.
Finlandia apretó… pero no lo suficiente
Ninguno de los dos equipos esperó a encontrar ritmo. Salieron ambos del descanso con ganas de anotar desde fuera, pero con Alemania subiendo la intensidad defensiva considerablemente. El toma y daca no era favorable para los finlandeses, con los de Mumbrú desatando su potencial (72-54).
Con Markkanen echándose a la espalda todo el país, poco a poco se iban acercando (77-66). Valtonen apareció a lo grande, como ya hizo ante Serbia, para seguir recortando la distancia y meter dudas, pero esta vez de verdad, a una Alemania que había cortocircuitado. Estaban cerca para el último cuarto (81-73), mejor de lo que pintaba minutos atrás.
La fórmula para los campeones del mundo era simple, la misma que funcionó en las demás eliminatorias: cargar el aro posesión sí y posesión también. Volvieron a aparecer los Theis, Tristan, Franz y compañía para bajar pulsaciones y dejar a Finlandia cuatro minutos sin anotar (87-75).
Obst y Schröder decidieron que se acababa aquí y daban la puntilla desde el triple (96-80). Una distancia que poco a poco fueron manteniendo hasta la bocina final, que indicaba su pase al partido por el oro 20 años después. Triunfo cómodo (98-86) ante una Finlandia que poco pudo hacer para seguir el ritmo.
Los de Mumbrú, que se quedaron a las puertas de la final en 2022 tras ser eliminados por España (y la primera vez en su historia que se metían en dos consecutivas), jugarán su primer partido por el título del Eurobasket desde 2005. La tercera desde 1993, cuando se hicieron con el oro y estaban entrenados por Pesic.
El domingo (20:00h) tendrán la oportunidad de seguir escribiendo un capítulo nuevo en su recuerdo. Podrían convertirse en los actuales campeones del mundo y de Europa, mostrando a todos el potencial que tienen y de lo que son capaces.