Por Javier Molero / jmolero@eurohoops.net
Cuando nadie lo esperaba, el Real Madrid gana en Belgrado (72-78) a Estrella Roja e iguala aún más la zona media de la tabla. La pelea por el Playoff directo está al rojo vivo. Cinco equipos con 18-14, incluidos estos dos, y tan solo dos jornadas para que todo termine.
Después de un inicio tan sensacional como caótico, los de Chus Mateo hicieron un ejercicio de supervivencia notorio en una cancha tan difícil. Tavares (14 puntos, 10 rebotes), impuso su ley en la pintura. Por parte de los serbios, Codi Miller-McIntyre se fue hasta los 24. Cuatro triunfo seguido de los blancos y subiendo.
El Madrid se aprovechó del caos de inicio
Es difícil explicar lo que ocurrió los primeros minutos. Un 0-14 de parcial del Real Madrid desataba la locura en Serbia. El rebote ofensivo daba muchas posesiones a Estrella Roja, pero no convertían nada. Ni Teodosic ponía orden en un ataque que empezaba 0/12 desde el triple.
Los primeros puntos de los locales (2-14) llegaban desde el tiro libre…¡y a los seis minutos de partido! Uno de los inicios más locos de lo que llevamos de Euroliga. Chus Mateo buscaba las esquinas, y un polivalente Garuba abría la pista con siete puntos seguidos. Un frenesí propio del baloncesto llevaba al 9-22 en un comienzo irreal.
El Madrid insistía con la caída de Tavares, y el de Cabo Verde respondía. Llull ayudó a poner una marcha más cuando el partido lo pedía, porque Estrella Roja volvía a ser más reconocible. Pero la defensa de los blancos volvía a ser una trituradora. Es difícil dejar sin ideas a Tedosic, pero lo hicieron (14-30).
John Brown tuvo un impacto masivo en ataque y defensa para despertar a los serbios, que también se jugaban mucho. La sangría en el rebote ofensivo de los blancos preocupaba, pero había manos por todas partes. La loca primera parte se convirtió en un intercambio de canastas, pero con el Madrid muy seguro. En un inicio de ensueño, los blancos mandaban 27-42 al descanso.
Estrella Roja lo llevó al barro
Garuba y Tavares cerraban el camino al aro, pero Estrella Roja encontraba hombres liberados, aunque los porcentajes eran demasiado grises (llegaron a acumular un 4/27). El Madrid se convirtió en un mar de dudas en ataque. Sin ideas en estático, los serbios apretando… y solo dos puntos en cuatro minutos.
El encuentro se fue al barro, y los serbios estaban más cómodos ahí, obligando al Madrid a jugar lejos (41-51). Siempre con una distancia cómoda que permitía maniobrar y rotaciones cortas, pero Crvena fue poco a poco metiéndose de lleno para firmar un 45-55 antes de los diez minutos finales.
Nervios y un triunfo de oro
La trituradora defensiva dejó a los serbios sin anotar los dos primeros minutos del último cuarto. John Brown volvió a animar a los suyos (52-61), y Chus Mateo tenía que pararlo. Muchas imprecisiones en un Madrid atípico y que parecía nervioso. Pero los minutos pasaban, y el reloj corría a su favor.
Con tres minutos por jugar (62-70), Tavares impuso de nuevo su ley para que el triunfo no se escapase. El partido se fue a varias acciones protestadas por el público, miles de revisiones y una antideportiva al pívot y a Kalinic de por medio. 69-74 a falta de un minuto, y con todo Belgrado apretando para la victoria.
Miller-McIntyre creó un partido nuevo con un triplazo (72-74) a falta de 45 segundos. Campazzo hizo respirar a los madridistas (72-76) con dos buenos tiros libres. Estrella Roja buscó el 3+1, pero esto no se le escapó al Madrid. Triunfo de supervivencia (72-78) para firmar la cuarta victoria seguida.
En un escenario temible frente a uno de los equipos más en racha de la Euroliga, los de Chus Mateo tiran de orgullo y confirman las buenas piernas que te tienen en el final de temporada. Con el Play-in prácticamente asegurado (18-14), el objetivo es el Playoff directo. Empatados con Barça, el propio Estrella Roja, Anadolu Efes y Paris, la igualdad es máxima. La próxima cita es ante los parisinos (jueves 3 de abril, 21:00h) para dar un paso más en Europa.