Por Alex Molina / amolina@eurohoops.net
La Final Four de Abu Dhabi ya es parte de la historia y sin ninguna duda no ha sido un torneo a cuatro bandas más para decidir el campeón de la Euroliga. La llegada del mejor baloncesto a la capital de los Emiratos Árabes Unidos es un antes y un después para la competición continental de referencia en Europa. Viendo cómo va el presente y sobre todo el futuro del baloncesto mundial, no es de extrañar que la NBA quiera sacar provecho de la situación de una forma u otra, pero la Euroliga sigue con su camino y éste pasa por la expansión de la competición.
Tal y como dijo Rudy Fernández, leyenda de la competición y uno de los representantes oficiosos de la llegada de los petrodólares a la Euroliga hacia nuevos mercados, la presencia de Abu Dhabi era cuestión de tiempo… y su relevancia va a ir a más.
🗣 Rudy Fernández lo tiene claro respecto Abu Dhabi: “He tenido la oportunidad de ver lo comprometida que está a nivel deportivo. Como lo hacen otras ligas, como la NBA, la Euroliga tiene que abrir las fronteras y hacer conocer una de las mejores ligas de Europa” pic.twitter.com/xsrVmh7vxx
— Eurohoops España (@EurohoopsES) May 23, 2025
Cambios a la vista
Que el torneo final de la Euroliga haya viajado hasta los Emiratos Árabes es tan solo la punta del iceberg, ya que todo parece indicar que Dubái pasará a formar parte de los 20 equipos de la temporada. Sí, la Euroliga 2025-26 tendrá 20 equipos ya que Paulius Motiejunas, CEO de la competición así lo anunció.
🚨 Motiejunas confirma la expansión de la Euroliga:”Creemos que estamos listos para 20 equipos, creemos que tenemos suficientes candidatos fuertes para crecer hasta los 20 equipos. Es el momento de dar el paso. Los clubes tomarán la decisión, ya les hemos compartido la propuesta” pic.twitter.com/bppIfYJE0I
— Alex Molina (@alex30mp) May 24, 2025
No fue el único gran cambio que -salvo sorpresa mayúscula- tendremos a partir de la próxima campaña. Hacía mucho que los jugadores se quejaban al respecto e incluso Bostjan Nachbar, presidente del sindicato de jugadores, lo dijo claro: se tiene que terminar el partido por el tercer y cuarto puesto. La final de consolación era un castigo durísimo para todos los implicados, jugadores y espectadores, y los deseos de todo el mundo se van a cumplir, ya que Motiejunas también anunció que se acabó la pachanga previa a la gran final.
¿Cambios a la vista?
Estos dos cambios parecen inevitables, pero también hubo tiempo en Abu Dhabi para las súplicas y éstas llegaron por parte de los grandes derrotados. Ni Olympiacos ni Panathinaikos llegaron al partido por el título, un patinazo por partida doble que nadie esperaba y que sus respectivos entrenadores aprovecharon para quejarse de cómo está montada la competición. Bartzokas, probablemente el que sale más tocado de la Final Four, se lamentó de que una vez más, su equipo terminara primero en la fase regular y que no terminara levantando el título. Dejando claro que probablemente lo tendría que decir tras ganar la Euroliga, el técnico griego calificó de “injusto” el hecho que su equipo se juegue toda la temporada a 40 minutos tras haber firmado una fase regular de categoría.
Un año más, el Olympiacos de Bartzokas se va sin título a pesar de terminar primero en la fase regular: “Para nosotros no ha sido justo, quedamos primeros esta temporada y hace dos y no tuvimos ninguna ventaja respecto otros equipos. Para los primeros, es un poco injusto” pic.twitter.com/ZAtwidv10n
— Eurohoops España (@EurohoopsES) May 25, 2025
Lo que el técnico del Olympiacos no hizo fue proponer una solución a su queja, algo que sí que hizo Ergin Ataman. El técnico del destronado Panathinaikos también sugirió un cambio de formato: en vez de jugar las semifinales en el mismo día, repartir los tres -a partir de la temporada que viene- partidos a jugar durante todo el fin de semana: una semifinal el jueves, otra semifinal el viernes y el domingo reservado para la gran final.
Ataman critica insultos recibidos y propone un nuevo calendario para la Final Four
El calor, el gran protagonista
Ni el Fenerbahce coronándose como nuevo campeón de la Euroliga ni el cambio que supone dejar entrar al Oriente Medio en ella fueron un 1% de protagonistas. La gran estrella, ese factor que lo condicionó todo, fue el calor. Se me hace difícil describir qué se siente bajo el Sol abrasador de Abu Dhabi (o la Luna, que estábamos a más de 30 grados a pesar de haber caído ya la noche) así que allá van algunos ejemplos. Hacía tanto calor que no se podía usar aparatos electrónicos, ya que se recalentaban y dejaban de funcionar. Hacía tanto calor, que la Fan Zone tuvo que ser en un centro comercial. Hacía tanto calor, que los aficionados de todos los equipos no pudieron hacer la previa de rigor fuera del pabellón, teniendo que esperarse los fans de Olympiacos y Panathinaikos a haber entrado al Etihad Arena a tener la trifulca de cortesía. Hacía tanto calor, que la vida giraba alrededor de estar en estar en ambientes climatizados, ya sea en edificios o medios de transporte. Literalmente, era imposible hacer algo al aire libre, algo que como es lógico, dificulta mucho el disfrute de la gran fiesta final de la temporada en la Euroliga.
Obviamente, este es un problema que no tiene solución y que visto lo visto, tampoco es que fuera un gran problema para los implicados. El magnífico Etihad Arena tuvo un ambiente de lujo, con los aficionados griegos y turcos dándolo todo, dos países a los que desplazarse hasta la capital del emirato no les supone un gran problema. De hecho, la distancia de Estambul (ciudad del nuevo campeón de la Euroliga) hasta Abu Dhabi es menor que la que hay respecto Madrid, una situación similar que viven los aficionados de los equipos de Grecia y Serbia, dos países que están ganando cada vez más relevancia en el panorama europeo y a los que les prácticamente les da igual desplazarse hasta Abu Dhabi que hacerlo hasta gran parte de Europa.
