Por Semih Tuna/ info@eurohoops.net
Errick McCollum, que se reencuentra con el Galatasaray MCT Technic a los 37 años, una década después de liderar a los Lions a la conquista de la 7DAYS EuroCup como Jugador Más Valioso de la temporada 2015-16, quiere añadir un título de la Basketball Champions League a su larga lista de logros.
El experimentado base, capitán del Galatasaray, habló con Eurohoops sobre sus objetivos para la próxima temporada.
“Esto dice mucho de la confianza del cuerpo técnico en mí, en mi liderazgo, pero también en mis compañeros”, asumió la capitanía. “Ser capitán o líder implica saber seguir, además de liderar. Ser humilde, maduro y dar buen ejemplo. Así que mi objetivo es hacer eso y ayudar al equipo en todo lo que pueda”.
En su primera etapa con el histórico club de Estambul, el actual entrenador, Yakup Sekizkok, fue asistente de Ergin Ataman.
“Nuestro estilo de juego, rápido, ir a por todas”, McCollum encontró más similitudes. “Ser agresivo, ser atacante, creo que es algo muy similar, ese tipo de mentalidad. Obviamente, la expectativa de ganar, de hacerlo bien, es algo que te acompaña en todo el Galatasaray. No importa si es ahora o hace diez años, la afición, la organización, esperan ganar; eso es algo que yo también espero”.
“Obviamente, mi rol”, añadió, repasando las diferencias, “es que soy mayor, así que tengo que ser más maduro, centrado en el equipo, asegurarme de que todos hagan lo que el entrenador necesita, seguir el plan y asegurarme de que yo también lo hago. Cuando eres más joven, intentas encontrar tu lugar, tu terreno. A medida que te haces mayor, te centras más en ti mismo. Ya sabes lo que puedes hacer, ya sabes cómo encajas. Así que ahora tu enfoque se centra en el equipo”.
“Lo que el equipo necesite”
Tras dejar el Karsiyaka y unirse al Fenerbahçe Beko en enero pasado, fue una de las figuras clave en la conquista de todos los títulos posibles, incluyendo la Turkish Airlines EuroLeague en Abu Dabi.
“Sea lo que sea que el equipo necesite”, McCollum anticipó sus contribuciones al Galatasaray en la BCL y las competiciones nacionales turcas. “Dondequiera que vaya, siempre veo anotaciones, siempre veo esa capacidad para anotar, la creación de goles, y siempre veo a alguien consistente, que va a estar ahí. Soy un tipo que no se pierde ningún partido. Soy un tipo que sale al campo, se esfuerza al máximo, y soy un tipo al que hay que enviar dos jugadores. No hace falta que hagan doblete, pero sí hay que buscar ayuda. Un solo jugador no puede defenderme ni siquiera con 37 años”.
“Eso quedó claro el año pasado”, continuó. “Estoy en la Euroliga, fui el segundo máximo anotador del equipo campeón, y creo que eso es algo que seguirán viendo aquí. Obviamente, independientemente de si tus minutos son muchos o pocos, simplemente haces lo que el equipo necesita y me verás siendo eficiente, con buenos porcentajes de tiro y haciendo lo que el equipo necesita en esos momentos”.
“Lo mejor para mi familia”
El nativo de Canton, Ohio, recibió una oferta para la Euroliga 2025-26, pero aceptó la del Galata.
“Sí, había algunos equipos interesados. Me querían. Pero yo también quería quedarme en Turquía. Sabía que era una buena opción para mi familia”, declaró a Eurohoops.
Su familia ahora se siente cómoda en el país, aprendiendo el idioma e incluso superándolo como turcohablantes.
“Sin duda”, confirmó que Turquía es su segundo hogar, refiriéndose también a sus familiares, incluyendo a la estrella de la NBA CJ McCollum, “es un lugar en el que me siento cómodo. A mi familia también le encanta visitarnos, no solo mi esposa e hijos, sino también nuestros padres, mi hermano, mis primos, como todos los que han venido aquí; disfrutaron mucho de Turquía”.
De vuelta en la Champions League, se encuentra con Marcelinho Huertas, de 42 años, en la directiva del La Laguna Tenerife.
“Mi mujer probablemente se enfadaría si jugara hasta los 42”, bromeó sobre la posibilidad de retirarse más joven.
“Success and legacy”
Tras graduarse de Goshen, en la División II de la NCAA, las proyecciones iniciales distaban de convertirse en un nombre reconocido y estar entre los mejores jugadores que jamás hayan mostrado su talento en Europa.
“Siempre he trabajado, siempre he dedicado tiempo, y una vez que desarrollas esa mentalidad, simplemente se convierte en quien eres. Así que ya no se trata de trabajar más ni de tirar más, sino que es parte de tu ADN, parte de tu carácter”, describió sus esfuerzos individuales durante los últimos 15 años.
“Siempre me gusta tener éxito en la cancha. Me gusta ganar y jugar bien, y entiendo que la única manera de lograrlo es dedicando tiempo extra. Así que ganar me motiva y me impulsa a ser un buen jugador; ayudar al equipo a ganar es lo que me motiva”, añadió, buscando una rápida transformación de un título de la Euroliga a la BCL.
“Es cambiante, ya que cuando eres más joven, quizás buscas el dinero, quizás buscas llegar al máximo nivel. Cuando has logrado esas cosas, lo único que buscas ahora es el éxito y un legado”, añadió.
McCollum también habló sobre hablar con jugadores más jóvenes, incluyendo a Brandon Boston Jr., quien recientemente se unió al Fenerbahçe, sobre la posibilidad de explorar opciones en el extranjero.
“They were so close”
La temporada pasada, el equipo dirigido por Sekizkok llegó a la final de la Final Four en Atenas, pero se quedó a las puertas del Unicaja.
“Mi motivación siempre es ganar un campeonato a estas alturas. Por eso también elegí a este equipo”, declaró McCollum a Eurohoops. “Estuvieron muy cerca, llegaron a la final de la Champions League, y sentí que estaban ahí mismo, y espero poder ayudar a levantar el trofeo de nuevo”.
En el Grupo E de la nueva temporada regular de la BCL, Galatasaray tiene una ventaja de 1-0 después de comenzar un calendario de seis juegos con una victoria contra Igokea m:tel en el Centro de Desarrollo de Baloncesto de Turkcell el martes.
“Dejo que la historia decida”
Excampeón de la Euroliga y la Eurocopa, la estrella del Galata se unió a una lista de 24 jugadores con semejante éxito, entre ellos las estrellas europeas Rudy Fernández, Ricky Rubio, Nando de Colo y Milos Teodosic.
“Creo que es más difícil para los estadounidenses. A veces se les ignora porque cambian de equipo con más frecuencia y no tienen tanta estabilidad. A veces, al cambiar de país, donde suelen haber más jugadores europeos en el equipo durante más tiempo, es más fácil dejar huella. Y luego, cuando no tienes pasaporte, ese tipo de cosas, a veces es más difícil ascender en la clasificación”, dijo McCollum.
“Cuando empecé a jugar al baloncesto, mi objetivo era simplemente obtener una educación gratuita. Eso me permitió obtener una beca. Y luego, cuando me di cuenta de que quizás había potencial para más, quise jugar profesionalmente. Y una vez que lo logré, solo quería poder mantener a mi familia”, continuó. “Nunca me metí en esto con la intención de hacer historia. Solo quería ser el mejor jugador posible y que mi familia nunca necesitara ni careciera de nada, y sabía que el baloncesto podía ayudarme a lograrlo. Así que, cuando lo logré, nunca sentí presión. Nunca me sentí estresado porque mi familia tenía lo que necesitaba, así que me fue fácil jugar con libertad. Y luego, a medida que sigues jugando, tus metas cambian, empiezas a querer más y más, y cuando me di cuenta de que podía convertirme en un campeón, de que podía hacer ciertas cosas, sentí que estaba corriendo la carrera por mí mismo. Nunca intento compararme ni competir con nadie”.
“Creo que he logrado más con el baloncesto de lo que jamás imaginé y he tenido más éxito del que jamás soñé”, compartió con Eurohoops. “La felicidad residió en desafiar mis pronósticos. La felicidad residió en lograr mis metas, mis sueños. Así que dejo que la historia decida dónde me colocan y qué piensan de mí. Creo que es solo un cumplido. Quizás sea el jugador favorito de alguien, quizás no, así es la vida, pero creo que siempre respetarán mi carácter, mi forma de afrontar el juego, mi profesionalismo y mi capacidad para ganar”.