Por Adrián Garitaonaindia Jiménez / info@eurohoops.net
Clara, solvente y por la vía rápida. Así ha sido la victoria del Real Madrid sobre el Dreamland Gran Canaria en el partido inaugural de los playoffs de la Liga Endesa. Los blancos vencieron por 105 a 70 y colocaron el 1 a 0 en la serie a costa de un conjunto amarillo que acumula ya cuatro derrotas consecutivas.
La propuesta de Jaka Lakovic pasaba por tratar de influir en el juego de los locales a través de incomodar a los interiores, pero su planteamiento no funcionó tanto como le hubiera gustado. El small ball de inicio y sus posteriores adaptaciones castigaron la movilidad de Walter Tavares en situaciones de bloqueo directo, abriendo el campo para los lanzamientos exteriores, pero las faltas llegaron pronto. Tanto Pierre Pelos como Ethan Happ se cargaron de personales en los primeros minutos y el plan se vio un tanto condicionado.
Dzanan Musa obró como principal oposición a la táctica claretiana, que viendo como le invitaban a tirar pasando los bloqueos por detrás, no dudó ni un instante en comenzar a lanzar. El bosnio sumó 14 tantos en el primer cuarto, producto de, entre otras cosas, su 2 de 3 en triples, y cerró la cita con 26 puntos en su cuenta.
Tras el primer asalto, fue Sergio Llull quien se encargó de tomar el relevo anotador, y con 11 puntos fue quien lideró la ofensiva capitalina. El desacierto exterior de los isleños en tiros abiertos y relativamente cómodos les castigó y restó capacidad competitiva, y fue junto al rebote lo que les acabó por sacar del encuentro.
Con las recientes debilidades del Gran Canaria presentes de nuevo durante la segunda mitad, los hombres de Chus Mateo no dieron opción a sus rivales tras la reanudación (59-32) y abusaron de un oponente carente de ideas y acierto. La jugadas espectaculares se sucedieron y una vez todo estuvo visto para sentencia, ambos técnicos aprovecharon los compases finales de la cita para salvaguardar energía en ciertos jugadores.
acb Photo / H. De la Rubia